“Deja legado de servicio y servidumbre genuino”
Por Joel Morales
El Informador
HOLLAND, MI
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Para aquellos que tuvieron el privilegio y oportunidad de conocer a Sarah Pérez-Von Rossum, quien falleció el domingo 28 de enero, saben que la mujer tenía un corazón de oro y que era la primera en dar de su tiempo, ofrecer su ayuda y hasta su casa a quien lo necesitaba.
De acuerdo con su familia, la hispana que tenía 67 años de edad, había estado enferma por un tiempo pero en estado estable últimamente, y en sus días finales padeciendo de demencia.
“Me siento muy agradecido que no murió sola”, nos dijo su hijo Frank Pérez el martes 30 de enero, quien dijo haber estado a su lado cuando de repente se agravo su salud. “Tuve la fortuna de poder pasar los últimos momentos con ella, platicar y hacerle compañía”, agregó.
Pérez-Von Rossum, comerciante y muy reconocida propietaria del salón de belleza Chicago Cuts, estuvo muy involucrada en la comunidad, de voluntaria en las escuelas, las organizaciones caritativas y con su iglesia, tanto en Holland como en Grand Rapids, pero lo que la caracterizó más era su pasión y su compasión por los menos afortunados, adoptando hasta varios niños que necesitaban de una familia y les dio un hogar y el amor.
Cuando vivía en Chicago, Illinois y antes de trasladarse a la ciudad de Holland, fue muy activa en la comunidad, ayudándole a la gente a llenar sus documentos de inmigración, traduciendo, interpretando y hasta llevándolos a sus citas, ya que trabajaba como asistente para un abogado.
La mujer también tuvo varios salones de estética y tiendas de ropa, fue presidenta del sindicato International Brotherhood of Grocers Workers Union, representando y defendiendo a obreros que estaban a punto de perder sus empleos. Fue seleccionada para ser la estilista de cabello para las estrella del show de Broadway “Woman of the Year”, peinando a los actores Lauren Bacall, Cybil Shepard y Bruce Willis.
En septiembre del año 2001, después de no soportar ver más las imágenes que pasaban por la televisión de la devastación en la ciudad de Nueva York por los ataques terroristas allí de las torres gemelas, la mujer latina inició una campaña con casas de bomberos locales para colectar donaciones, artículos y comida para los afectados, empacó su camioneta con las provisiones y junto con una media docena de personas, hizo el viaje de unas 15 horas de camino sin parar a la ciudad de Manhattan, para visitar, estar junto a, y dar consuelo a las víctimas allí.
“Mi madre siempre estaba ocupada ayudando a la gente. Era una persona muy amable y humanitaria”, dijo su hijo Frank. “Dejó huellas en esta ciudad”, agregó.
Pérez dijo que su madre, quien siempre estaba ocupada ayudándole a alguien, vivió una vida de abogacía, y que era la voz de los más necesitados.
Pérez-Von Rossum deja atrás a sus padres Pablo y María Martínez, a hermanos John y Efraín Martínez, a su pasado esposo Oscar Von Rossum, sus hijos Frank y Ashli Von Rossum-Pérez,
Sarah Jessica y Carlos García-Martínez, Nathan Von Rossum, Kyle Von Rossum, nietos Darius, Dorian, Destiny, Davyn, Nathaniel, Malaki, Teagan, Josiah, Sileas, Valentino, Maxemiliano, sobrino John, sobrina Alissa y muchos primos.
El velorio para la difunta se llevará a cabo este viernes 2 de febrero en la casa fúnebre Langeland-Sterenberg, ubicada en el 315 E. de la calle 16 en Holland. El servicio de funeral se llevará acabo el sábado 3 de enero, a las 11 de la mañana en el mismo lugar.
