Opinión por Héctor Loya
Desde hace mucho la historia reciente de EEUU se resume como la historia de la energía, en el uso de lo que se tiene y la búsqueda de lo que no se tiene, el cual dictó la política energética y monetaria del mundo durante los últimos 40 años.
Todo esto cambió con la llegada del demócrata Joe Biden al poder, el cual envalentonado por la idea de que para el 2030, el petróleo ya no importaría, y hasta afirmó durante la campaña presidencial, que aislará a Arabia Saudita, que dejaría de venderles armas y que los exhibirá como unos parias.
Estados Unidos siempre ha entendido el valor geopolítico de controlar el suministro energético, pero la realidad le dio un duro golpe a Biden en cuanto su administración impuso sanciones a Rusia y los precios de las gasolinas se dispararon.
Los republicanos de inmediato usaron el tema para atacar al gobierno demócrata, entonces Biden, desesperado, pidió al príncipe Muhammed Bin Salman que aumentará la producción de petróleo para que los precios en EEUU pudieran disminuir.
Bin Salman no aceptó y ahora Biden, con la posibilidad de perder las elecciones intermedias, decidió liberar desde marzo, un millón de barriles durante seis meses, llevándola a su nivel más bajo desde 1985.
Estados Unidos decidió apretar aún más a la economía de Rusia y declarar un límite de precio a las compras de petróleo en el mundo.
Biden parece estar dispuesto a sacrificar una de las más grandes herramientas geopolíticas con las que cuenta Estados Unidos con tal de que su partido retenga la Cámara de Representantes.
Pero ¿Qué pasará una vez que se lleven a cabo las elecciones? Sin duda, los altos precios del petróleo benefician a la OPEP, por lo que se podrían esperar aún más recortes. Pase lo que pase, estamos presenciando un momento de realineación de fuerzas internacionales.
La OPEP+ está abiertamente desafiando al “gobierno más poderoso del mundo”. Lo más interesante de todo es ver cómo Estados Unidos y la Unión Europea, han quedado relegados a espectadores en este juego donde la OPEP tiene todas las cartas.
