DOUGLASS, MI (ELINF). –Por Erika Mendivil/El Informador
La noche del pasado martes fue marcada por la polémica en el condado de Montcalm cuando residentes del área se reunieron, algunos protestando y otros apoyando, en una conferencia de prensa sobre la posibilidad de construir un parque de energía eólica en su comunidad.
La compañía Apex Clean Energy llevó a cabo una jornada de puertas abiertas en el Douglass Township Hall para compartir más información sobre el proyecto y todo lo que involucra. Actualmente, la compañía estima que el parque eólico que está desarrollando incluiría 75 turbinas que luego entregarían energía a la red eléctrica de Michigan, lo que reduciría la necesidad de suministrar energía desde mercados externos. La compañía explica que la necesidad del proyecto hoy es mayor que nunca debido al cierre de Michigan de algunas de sus plantas de energía y nucleares.
Uno de los residentes que apoya el proyecto señaló que tienen muy buenas esperanzas en el proyecto debido a que ayudará a que muchas personas mejoren su condición de vida en caso de que no tengan suficiente dinero para pagar la electricidad. Aunque algunas personas han firmado contratos de arrendamiento con la compañía, es probable que no se coloquen turbinas debido a que algunas propiedades están localizadas junto a dos lagos.
Los que están en oposición al proyecto argumentan que las turbinas son ruidosas, causan interrupciones en la vida silvestre y podrían llegar a causar interrupciones en los patrones de sueño debido al intrasonido que crean. La gran mayoría se preocupan más por lo que describen como distancias «inseguras» entre las turbinas y las casas o las líneas de propiedad.
Apex, por su parte, explica que su estándar interno actual es usar la base de la turbina hasta la punta de la pala como parte de cómo miden una distancia segura. La longitud total de las turbinas debe ser una vez y media la longitud de una línea de propiedad y dos veces de una casa. Los opositores dicen que no es lo suficientemente lejos, y quienes lo apoyan dicen que distancias más restrictivas eliminarían las turbinas por completo de las áreas en el oeste de Michigan.
Uno de los opositores resaltó que no están en contra de las energías renovables sino que las apoyan. Lo que más les preocupa es la ubicación de dónde se planean colocar las turbinas eólicas y argumentan que deben de estar lo más lejos posible de asentamientos urbanos.
En caso de que el proyecto sea aprobado, las turbinas podrían estar completamente instaladas para el año 2024.
