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Es cada vez más común que vayas por las calles de las ciudades y veas a las personas caminando por la calle, entrando a negocios y en demás espacios públicos sin el uso de cubrebocas, sin un distanciamiento social adecuado y sobre todo como si no les importara ya que nos encontramos en medio de una pandemia que ha cobrado la vida de miles de personas en todo el mundo.
Es lamentable que por más que lo digamos en los medios de comunicación a la gente ya no le importe, entendemos la situación, que es cansado estar en casa, que el dinero ya se acabó, que no hay los suficientes apoyos para todos, o no de la misma manera, pero de nosotros va a depender el futuro de nuestro estado y de nuestros hijos.
Esto último que se menciona es muy importante, pongámonos a pensar en que les vamos a heredar a las próximas generaciones, un estado contaminado por el virus, que ejemplo damos a los pequeños si salimos con ellos a exponerlos al virus, porque cuando vemos a las personas salir con sus hijos muchos de los pequeños no llevan cubrebocas.
Y créanos que así es, porque durante las marchas y manifestaciones pasadas los adultos llevaban a sus hijos sin ningún tipo de protección, esto es a criterio de cada padre y se respeta pero no creemos que valga la pena arriesgarlos.
En fin, aunque la economía ya se ha reactivado en varios sectores esto no quiere decir que bajemos la guardia y que demos por hecho que ya podemos andar por las calles, en los parques, en las tiendas, bares, restaurantes y demás lugares sin ninguna protección y como si nada pasara.
Ahora más que nunca hay que actuar las indicaciones para que en un futuro no muy lejano no nos veamos en la necesidad de volver a la cuarentena en el estado solo porque las personas no quisimos hacer caso.
¡El futuro del Michigan depende de nosotros!