Washington, 3 abr (ELINFORMADORUSA/EFE).- El presidente, Donald Trump, dio hoy por muerto el programa DACA que protege de la deportación a miles de jóvenes indocumentados, y exigió a México que afine sus controles migratorios para frenar el flujo de inmigrantes que se dirigen a Estados Unidos.
En una serie de tuits, Trump insistió en el anuncio que había hecho este domingo de que ya no está dispuesto a llegar a un acuerdo con el Congreso para reemplazar el programa migratorio DACA, que protegía de la deportación a unos 690.000 jóvenes que llegaron al país de niños, conocidos como «soñadores».
«DACA está muerto porque a los demócratas no les importa ni actuaron, y ahora todos se quieren subir al carro de DACA. Eso ya no funciona. Debemos construir el Muro y asegurar nuestras fronteras con legislación adecuada. ¡Los demócratas quieren que no haya Fronteras, y de ahí las drogas y el crimen!», escribió Trump.
El presidente se refería al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por su sigla en inglés), proclamado en 2012 por el expresidente Barack Obama y que daba a ciertos indocumentados una garantía de no deportación y un permiso de trabajo mientras estuvieran inscritos en la medida.
Trump anunció el año pasado el fin de DACA, pero el programa sigue parcialmente vivo, porque los tribunales han ordenado al Gobierno que siga aceptando solicitudes de renovación de la medida a aquellos inmigrantes que ya estaban inscritos.
La sentencia de Trump de que «DACA está muerto» y su anuncio del domingo de que no hará «más acuerdos sobre DACA» confirman que la Casa Blanca no está dispuesta a emplear más esfuerzos en la situación de los beneficiarios de ese programa, después de meses de desacuerdos con el Congreso sobre cómo sustituir la medida.
El destino de los beneficiarios de DACA está, por tanto, en manos de los tribunales de California y Nueva York que están tratando el tema, en lugar de en el Congreso y la Casa Blanca.
Preguntado hoy por qué les espera a los «soñadores», Trump echó la culpa de su situación a la oposición demócrata.
«Tuvieron una gran oportunidad, y los demócratas realmente les han decepcionado. Es una pena. Y ahora la gente se está aprovechando de DACA y eso es una pena», dijo Trump a los periodistas durante un acto tradicional para celebrar la Pascua en la Casa Blanca.
Trump ya había denunciado este domingo que «grandes riadas de gente» se dirigían a Estados Unidos desde México con el objetivo de «aprovecharse de DACA».
El programa DACA sólo beneficia a aquellos inmigrantes que hayan vivido en el país al menos desde 2007, por lo que no puede proteger a los indocumentados que están ingresando ahora en el país.
Pero la Casa Blanca cree que los coyotes usan DACA como propaganda, para prometer a los indocumentados que habrá programas similares para ellos en el futuro.
«DACA es un imán (que atrae a inmigrantes) (…) porque crea la expectativa de que se beneficiarán de medidas indulgentes como resultado del debate migratorio en EE.UU.», dijo a periodistas un alto funcionario de la Casa Blanca, que pidió el anonimato.
Los tuits de Trump se referían a «caravanas» de inmigrantes, una noción que parece haber sacado de su programa de televisión favorito, el conservador «Fox & Friends».
El domingo por la mañana, ese programa mencionó un artículo del portal Buzzfeed sobre más de mil inmigrantes centroamericanos, en su gran mayoría de Honduras, que han emprendido un viaje de un mes hacia EE.UU. en una «caravana» organizada para estar más protegidos.
Esa noticia parece haber indignado a Trump, que ha exigido al país vecino que refuerce sus controles migratorios si quiere que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) siga activo.
«México tiene el poder absoluto de no dejar que estas grandes ‘caravanas’ de gente entren en su país. Ellos deben pararles en su frontera norte (sic), algo que pueden hacer porque sus leyes fronterizas funcionan, no dejar que pasen a nuestro país, que carece de leyes eficaces», subrayó hoy Trump.
Los líderes demócratas en el Congreso, Chuck Schumer y Nancy Pelosi, guardaron hoy silencio sobre las acusaciones de Trump, y casi no hubo reacciones en sus filas, con la excepción de la senadora hispana Catherine Cortez-Masto y la congresista latina Michelle Luján Grisham.
«Ante la falta de liderazgo productivo del presidente, depende del Congreso aprobar una solución legislativa permanente para los soñadores, que incluya un camino a la ciudadanía», reclamó Lujan Grisham en un comunicado.
La Casa Blanca aseguró hoy que está preparando una nueva propuesta de reforma migratoria, aunque no aclaró si contendrá una solución para los «soñadores».