Los Ángeles, 15 ene (ELINFORMADORUSA/EFE News).-
n avión que estaba en una situación de emergencia y regresaba al Aeropuerto Internacional de Los Ángeles (LAX) tuvo que arrojar combustible que afectó a estudiantes de al menos tres escuelas locales, según las autoridades locales.
El avión que pertenece a la compañía Delta despegó de LAX con 149 pasajeros a bordo rumbo a Shanghai, cuando se le presentó una emergencia y tuvo que regresar rumbo al aeropuerto.
Las imágenes difundidas por televisiones locales muestran al avión volando bajo y arrojando chorros de combustible que cayeron en escuelas de la localidad de Cudahy, en el sureste del Condado de Los Ángeles.
El Departamento de Bomberos de Los Ángeles señaló en un comunicado que a raíz del suceso atendió a 16 personas en la escuela secundaria Jordan y en la escuela primaria 93rd Elementary.
La cifra de afectados asciende a más de 40, en vista de que los bomberos del condado de Los Ángeles atendieron además a 17 niños y nueve adultos en la escuela Park Avenue Elementary, aunque ninguno de ellos tampoco fue derivado a hospitales locales.
El hecho no ha merecido órdenes de evacuación, pero las autoridades, incluso de ciudades aledañas como Downey, de mayoría latina, enviaron mensajes a los residentes para que cierren sus ventanas y eviten salir a la calle mientras se evaluaba la emergencia.
El distrito escolar manifestó en su cuenta de Twitter que los paramédicos han atendido a aquellos que se quejan de «irritación de la piel o problemas respiratorios».
La compañía Delta dijo en un comunicado que «poco después del despegue, del vuelo 89 de LAX a Shanghai experimentó un problema de motor que requirió que la aeronave regresara».
«La aeronave aterrizó de manera segura después de una liberación de combustible de emergencia para reducir el peso de aterrizaje», agregó la compañía.
El vecindario afectado este martes es de mayoría latina y se ubica cerca a un área en la que una investigación de la Universidad del Sur de California halló el año pasado plomo en los dientes de leche de niños que vivían en este zona.
El plomo supuestamente procedía de la planta de reciclaje de baterías Exide, que recicló cada año unos once millones de baterías de auto y generó unas 3.500 toneladas de plomo antes de ser clausurada en 2015.