Un día como cualquier otro, Liz Demuynck, una policía de Utica, una ciudad de Michigan (Estados Unidos), salió a trabajar en su patrulla y vio cómo el conductor de un carro cometió una infracción. Ella intentó detenerlo, pero después se dio cuenta que se trataba de un hombre que quería llegar rápidamente al hospital porque su pareja estaba en labor de parto. Es así como la oficial dejó de lado la falta y decidió escoltarlos al nosocomio.
Mary Weertz y Austin Sadowski son las personas que integran la pareja de esta historia. Ellos vivieron un momento sumamente tenso el jueves 17 de octubre. Y es que ese día la mujer rompió aguas. El dolor la tomó por sorpresa.
Tras comunicarle a Austin, este subió a Mary a su camioneta y los dos se fueron rápidamente al hospital Corewell Health Beaumont Troy, según People. Justo cuando estaban cerca de Hall Road y Van Dyke Avenue, el hombre se vio obligado a hacer un giro ilegal, el cual fue visto por Liz Demuynck.
En ese entonces, la policía decidió perseguir el vehículo con el fin de detener al conductor para sancionarlo de acuerdo a ley. Como Austin no quería parar, llamó al 911 y explicó la situación, de acuerdo a información brindada por WXYZ y FOX 2. Eventualmente, la camioneta se detuvo y Demuynck, al enterarse de la situación, supo que había una emergencia.
Austin estuvo preocupado por la posibilidad de que lo detuvieran
Es por eso que, según WJBK, la oficial, que es madre de dos hijos, le dijo a Austin que “siguiera adelante”. Además, utilizó su radio para comunicar a sus colegas que iba a acompañar a la pareja al hospital. Cuando finalmente la pareja llegó al nosocomio, el hombre estaba preocupado por la posibilidad de que lo detuvieran.
“¿Necesitas mi licencia para algo?”, le preguntó Austin en aquel entonces a Demuynck. Ella, al escuchar la interrogante, le dijo: “No, estás bien. Cuídate”. Afortunadamente, hubo otra noticia positiva, ya que el bebé Henry nació ese día a las 11:10 pm hora local.
Desde el nacimiento del pequeño, la policía y la pareja se han mantenido en contacto. Demuynck está feliz de haber ayudado a los padres. “Ser madre y poder ponerse en el lugar de ella y saber lo que has vivido cuando has asistido al nacimiento de un bebé es una situación muy aterradora. Las cosas pueden cambiar muy rápido”, aseguró. Cabe mencionar que Mary y Austin están muy agradecidos con ella, a quien consideran la heroína de su familia.
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