Galeana (México), 14 de nov (ELINFORMADORUSA/EFE).-
Iberdrola México comenzó la primera fase de Luces de Esperanza en Nuevo León, estado al norte del país, un programa que lleva energía eléctrica a través de sistemas solares en diferentes ciudades mexicanas, en esta etapa se beneficia a 187 alumnos y docentes de siete centros educativos y en el primer año de iluminación esta cifra ascenderá a 935 en 5 años.
Uno de ellos es la escuela de educación preescolar María Curie, ubicada en el municipio de Galeana y localizada en la comunidad rural de San Rafael, la cual cuenta con poco más de 80 alumnos que ahora pueden disfrutar de música, luz en sus aulas y dispositivos tecnológicos debido a que Iberdrola México garantizó su suministro de energía.
Claudia Morales, abuela de la alumna Itzayana Abigail, quien cursa sus estudios en el plantel, aseguró que la llegada del programa Luces de Esperanza les cambió la vida positivamente porque antes tenían servicio intermitente de luz eléctrica.
Por su parte, la presidenta de la Asociación de Padres de Familia, Diana Karen Alejandro Balderas, compartió que en invierno, Galeana es un lugar donde se registran muy bajas temperaturas y ante la demanda del suministro de energía eléctrica se presentan los cortes de luz.
Asimismo, la directora del preescolar María Curie, Marlene Carolina Pequeño, destacó que Luces de Esperanza les permite contar con energía limpia y mejores herramientas para impartir educación.
Centros educativos beneficiados
Para inaugurar esta primera fase del programa se realizó un encendido en el preescolar Doctor José Eleuterio González, ubicado en la comunidad Las Diligencias, en el municipio de Monterrey, capital del estado nuevolense.
Desde su fundación, hace más de 20 años, el plantel no contaba con energía eléctrica, por lo que los estudiantes tenían que soportar las altas temperaturas en la región, de más de 40 grados, sin la posibilidad de aire acondicionado, pero ahora debido a la intervención de este programa su realidad ha mejorado.
Este encendido inaugural fue encabezado por la secretaria de Educación del estado, Sofía Leticia Morales Garza; la directora del preescolar beneficiado, Flor Melissa Guerrero; y por parte de Iberdrola, la directora de Comunicación y Responsabilidad Social, Paola Martínez Castro, entre otras autoridades.
A nombre del estudiantado y la comunidad beneficiada con el programa, Guerrero resaltó que por más de dos décadas se persiguió el sueño de que la institución de educación preescolar tuviera servicio eléctrico.
La directora de Comunicación y Responsabilidad Social de la empresa expuso que llevar energía a través de paneles solares a estas instituciones educativas es la primera fase de un esfuerzo de largo plazo.
«Iberdrola México inició este año una nueva etapa centrada en las energías limpias, en la que Nuevo León sigue siendo un estado fundamental para la compañía. Aquí tenemos dos plantas que suministran energía segura y confiable a nuestros clientes, además nos hemos sumado a iniciativas como el Programa voluntario de reducción de emisiones al aire», comentó.
En este compromiso con el estado, se confirmó que el resto de las escuelas de Educación Básica beneficiadas en Nuevo León son: el preescolar San Fernando, la primaria Vicente Guerrero y la secundaria número 3 Gerardo Guadalupe Leal Leal, todas ubicadas en el municipio de China, así como el preescolar Vicente Riva Palacio y la Primaria Ricardo Flores Magón, en Galeana.
El programa Luces de Esperanza se puso en marcha en noviembre de 2019 en comunidades rurales de la Huasteca Potosina, noroeste de México, y posteriormente se amplió a ayuntamientos del sur como Oaxaca desde el 2020 o también al centro del país, cuando en 2023 sumó dentro de sus beneficiarios a localidades del estado de Puebla.
A lo largo de sus distintas fases de Luces de Esperanza en los estados de San Luis Potosí, Oaxaca, Puebla y Nuevo León, a la fecha se ha beneficiado a un total de 8.661 habitantes con los sistemas fotovoltaicos tanto en espacios comunitarios como viviendas.
La inversión acumulada de este programa alcanza los 50 millones de pesos (2,43 millones de dólares), considerando que su objetivo es dotar de energía limpia a espacios que no cuentan con este servicio básico. Esta información se ha elaborado gracias a la colaboración de Iberdrola México.