Por Edgar Castro/El Informador
GRAND RAPIDS, MI (ELINF).-
Alex Torrez fue condenado a pasar de 28 a 60 años en prisión en enero por la muerte de su primo David Torrez y de Tara Oskam, estudiante de Calvin College. Torrez era el conductor de un automóvil involucrado en una persecución a alta velocidad que terminó en un accidente en Kentwood.
Su apelación detalla que fue condenado por pruebas insuficientes porque los fiscales no probaron que intencionalmente trató de matarlos.
Sin embargo, los jueces dictaminaron que los fiscales no tenían que demostrar malicia para condenar a Torrez de asesinato en segundo grado, solo que sus acciones no tenían en cuenta las circunstancias que ponían en peligro la vida de los ocupantes del vehículo.
El tribunal de apelaciones determinó que la evidencia muestra que las muertes de ambas víctimas fueron causadas por el accidente, en el cual Torrez conducía a una velocidad excesiva y no tenía una razón legal para causar su muerte.
La evidencia presentada en el tribunal mostró que Torrez conducía a más de 100 millas por hora y no aplicó los frenos antes del choque. Los toxicólogos también encontraron THC, Valium y alcohol en su sistema al momento del percance.
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