Por: Roger Rivero
Los sedanes deportivos con motores de 8 cilindros no son ya tan populares como hace solo cuatro o cinco años. Cada día más fabricantes los sustituyen por otros de seis y hasta cuatro cilindros turboalimentados, y junto a la afluencia de modelos eléctricos, hace pensar que quizá en menos de un quinquenio, los sedanes y cupés con este tipo de motor serán piezas de museo.
A pesar de estas tendencias, todavía hay suficientes compradores que valoran la ferocidad, la entrega de potencia limpia, fiabilidad y, sobre todo, la banda sonora que acompaña a estos briosos motores de aspiración natural. Para ellos, Lexus reserva uno de sus motores más icónicos. Es un V8 de 5.0 litros de 472 caballos de potencia y 395 libras pie de torsión, que conocimos hace más de una década en el IS F, y que aún Lexus utiliza en el hermoso LC 500.
La marca nipona ha rebuscado en su catálogo de éxitos y ha sacado el impresionante V-8 para regalárselo al IS 500 F Sport Performance que probamos esta semana. Un sedán vistoso y vigoroso, para revivir ese amor por los autos potentes, que por ratos parece esfumarse, pero que en Estados Unidos aún se mantiene vibrante.
¿Qué hay de nuevo?
El 2021 vio la llegada de un Lexus IS que no era totalmente nuevo, pero con actualizaciones significativas para promover su misión de ofrecer a los fieles de Lexus, un sedán deportivo legítimo. El pasado año las noticias sobre el IS mejoraron aún más, con el modelo IS 500 F SPORT Performance, que supone una renovación total del F SPORT.
Como primer modelo de lo que ahora se conoce como la línea F SPORT Performance, el IS 500 F SPORT Performance se diseñó pensando en los compradores estadounidenses, y por ser un modelo tan reciente, hay pocos cambios que resaltar en el 2023. Todas las modificaciones están centradas en su aspecto, con nuevos diseños de llantas y paquetes de apariencia.
¿Cómo se ve desde afuera?
Creo que junto al LC 500, es uno de los Lexus de mejor talante. Aquí la parrilla estilo reloj de arena es aún más grande, y tintada en negro brillante con contornos también negros parece algo amenazadora. Los faros elongados y el capó levantado (para acomodar al tamaño del motor) le dan carácter al frente, mientras que un alerón angular y el difusor trasero se encargan de darle personalidad a la parte trasera, sin olvidar las salidas de escape cuádruples.
¿Y por dentro?
Buena calidad, excelente acabado, pero sin mucho embrollo, más bien simple. Unas cuantas insignias «F Sport» salpican los umbrales de las puertas y vienen cosidas en los reposacabezas de los asientos deportivos. Por lo demás, el IS 500 F Sport está tapizado en cuero sintético blanco y negro con un exclusivo diseño geométrico en los paneles de las puertas. Lexus limita la tapicería roja más interesante a determinados exteriores, por lo que, lamentablemente, no se puede optar por el rojo sobre rojo. Los asientos son cómodos y de buen espacio al frente, pero algo ceñidos en la parte posterior. El maletero también queda entre los más pequeños entre autos comparables.
Tecnología y seguridad
No pude esconder mi sorpresa al encontrar en la consola central del nuevo IS 500 F Sport Performance el aborrecido panel táctil de Lexus. Por suerte, el acabado Premium trae una pantalla táctil opcional de 10,3 pulgadas en lugar de la pantalla básica de 8,0 pulgadas. Lexus ha acercado más esta pantalla al conductor, por lo que manejar las entradas allí con los dedos es mucho mejor que en el resbaladizo panel táctil.
La conexión con Apple CarPlay, Android Auto y Amazon Alexa es por cable, y no encontramos un cargador inalámbrico para el teléfono, quizá la única amenidad moderna que no trae este IS. Las prestaciones de seguridad activa son generosas y solo dejan por costo extra los sensores de estacionamiento, las cámaras en 360 grados y los parabrisas sensibles a la lluvia.
El manejo semi autónomo mantiene al Lexus centrado en el carril y a distancia prudencial de otros autos en la carretera, pero me amedrentó algo cuando probándolo en la autopista, tuve que intervenir rápidamente para evitar una posible colisión frontal, pues el sistema no actuó con la necesaria prontitud, algo que nunca había experimentado en otro auto.
¿Cómo se conduce?
El gran atractivo de este Lexus es por supuesto el icónico motor en V8, con 472 caballos y 395 libras de par, suficientes para llevarle de 0 a 60 millas o 100 kilómetros en solo 4.4 segundos. Circulando por la ciudad en modo Normal o Eco, este IS 500 se conduce como cualquier otro Lexus, solo que con la ventaja añadida de un gran motor bajo el capó, que no se nota durante la conducción normal. El IS 500 es silencioso y cómodo, apacible para la conducción diaria.
Agotados mis dos días de amodorramiento, recordé que tenía a mi disposición 472 caballos, y coloqué al IS en posición Sport S Plus. Así cobró toda la vida para la que fue creado. Por carecer de turbo, el motor no tiene mucho empuje a bajas revoluciones, pero enseña su excelente banda de potencia al pasar de las 3,000 revoluciones.Pisarlo a fondo para entrar a la autopista o adelantar otro auto es una motivación extra, por la banda sonora del motor.
Hay otras mejoras técnicas que ayudan a su desempeño en las carreteras sinuosas. La suspensión adaptativa, amortiguadores traseros de alto rendimiento y un diferencial de deslizamiento limitado, así como rotores de freno de gran tamaño, todos en conjunto, hacen que su desempeño deportivo sea atractivo, pero dejemos claro que no está a la par con sus contrincantes alemanes.
El IS 500 F Sport Performance es un paso resuelto en la dirección correcta, capaz de atraer a quienes no solo busquen el lujo y prestigio de Lexus, sino también un poco de exaltación y disfrute al volante de un auto.
¿Si quiero uno, por cuál me decido?
Entre sus similares, los sedanes deportivos de lujo, el IS 500 puede competir con precios asequibles. El Lexus IS 2023 está disponible en seis acabados: IS 300, IS 300 AWD, IS 350 F Sport Design, IS 350 F Sport, IS 500 F Sport Performance e IS 500 F Sport Performance Premium como el que probamos.
El IS 300 más económico comienza en los $40,085, mientras que, en el otro extremo, un IS 500 F Sport Performance Premium tiene un precio mínimo de $62,770.
¿Contra quién compite?
La competencia más sustancial proviene de Alemania, en la forma de BMW 3 Series, Audi S4 o Mercedes-Benz C-Class. Un Acura TLX o el Genesis G90 también pueden comparársele.
Concluyendo
Lexus ha sorprendido con el IS 500 F Sport Performance, pues a todas luces, esta es una especie en extinción. Sus contrincantes alemanes quizá sean los menos sorprendidos, pues a pesar de todas sus virtudes, no llega a “cazarles la pelea”.
Aun así, hay un extenso grupo de compradores que prefieren a la casa nipona, y un sedán deportivo con buen rendimiento de Lexus lo recibirán con exaltación.
Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera, los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.