Por Joel Morales
El Informador
GRAND RAPIDS, MI
[email protected]
La familia de D’Andre Bullis Sr. de 23 años de edad, de Wyoming, quien fue asesinado mientras estaba parado a la orilla de la avenida Grandville SW en Grand Rapids el viernes, 5 de mayo, le dijo a El Informador el jueves, 3 de agosto, que está lista para que se realice el juicio del acusado.
Andy González, de 22 años, de Grand Rapids es acusado de homicidio abierto, intento de homicidio y delito grave en el uso de un arma en conexión con la muerte de Bullis, quien estaba platicando con su primo Manuel Villarreal, cuando fue acribillado.
Villarreal, junto con su madre, Nora Villarreal y una hermana, esperaron en la Corte de Circuito 17 para la conferencia del acusado. Aproximadamente media hora después de que estaba supuesto a aparecer el acusado, una guardia de la corte nos informó que González no aparecería, que el juez iba hacer la cita para su juicio.
El Informador habló con la familia para conocer sus sentimientos sobre el proceso y de la experiencia que han estado pasando a través de la tragedia.
“Creo que hemos sufrido lo suficiente”, dijo Manuel Villarreal de 26 años, quien, desde que fue impactado por tres balas ese día, ha estado atado a una silla de ruedas. “Ya quiero que lo enjuicien, lo encierren y que se acabe todo esto”, agregó.
El hispano dijo sentir mucho coraje, frustración y que no ha podido dormir ni pensar desde que ocurrió el homicidio de su familiar.
“Nadie quiere estar atado a una silla de ruedas”, dijo Villarreal. “Lo que ocurrió ese día lo revivo en mi mente todos los días. Un minuto estábamos platicando y riéndonos de cosas, y el otro estaba viéndole tirado sobre la calle”, agregó.
Nora Villarreal dijo que ella también está sufriendo al ver a su hijo sufriendo. Dijo que antes se levantaba todos los días para ir a trabajar, que nunca ha pertenecido a ninguna pandilla como la policía había sugerido.
“¿Qué, ya no se puede caminar por la calle sin que alguien te quiera hacer daño?”, pregunto la mujer. “Él (Andy) no puede decir quién puede andar en la calle y quién no puede. Esto es totalmente sin sentido”, agregó.
La madre dijo que su fe le dice que tiene que perdonar, “Pero, ¿cómo estoy supuesta a perdonar cuando siento tanto coraje?”, preguntó.
La mujer dijo que siente compasión por la familia de González “porque ninguna familia quiere pasar por eso”, y porque son dos familias afectadas por lo que pasó. Dijo que no culpa a los padres porque el joven actuó de su propia voluntad.
“Qué ganaste con esto, excepto tener que pasar el resto de tu vida en la cárcel”, dijo Manuel Villarreal. “Mi primo (D’Andre Bullis Sr.) estaba dispuesto a entrarle a golpes y no portaba arma”, agregó.