Una demanda interpuesta por la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU), reveló cientos de documentos y comunicaciones en las que detallan cómo el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) vigiló a migrantes y a sus familias.
La evidencia liberada da a conocer el uso de un localizador electrónico vinculado con la matrícula de los autos de los inmigrantes para mantenerlos bajo vigilancia.
El periodo de la vigilancia por parte de ICE comprende del 22 de septiembre de 2014 al 11 de junio de 2018, donde queda manifiesto el interés de las autoridades migratorias por acceder a los datos que recoge una empresa que permite rastrear a inmigrantes en todo Estados Unidos utilizando las matriculas de sus autos.
Vigilant Solutions recopila todos los días millones de registros de placas de vehículos a través de múltiples cámaras con lectores que ha colocado en las 50 ciudades más pobladas del país. Las cámaras se localizan en zonas de alto tráfico como peajes, puentes, cruces peatonales, avisos de carretera y en las unidades de policía.
En un correo, que se describe dentro de los casi dos mil documentos revelados, un agente de inmigración proporciona varios datos personales de un fugitivo. “Su página de Facebook no muestra mucho, pero la página de su hija tiene una foto reciente de los dos con fecha del 23 de septiembre de 2017”, señala el agente, confirmando que la vigilancia de las redes sociales de los migrantes también se extiende a los miembros de su familia.
Cada vez más ICE y otras agencias gubernamentales están vigilando las redes sociales de individuos y sus comunicaciones privadas obteniendo órdenes judiciales.