Por Joel Morales
El Informador
GRAND RAPIDS, MI
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Ramon Logan, un joven que tenía 16 años cuando la policía dijo que mató a un hombre de 39 años que estaba sentado en el patio de una casa en la cuadra 1600 de la avenida College SE el año pasado, apareció frente al juez David J. Buter el martes, 7 de noviembre.
De acuerdo con la policía, el difunto, Kenneth Kirkwood, padre de tres hijos de 5, 20 y 23 años y quien se encontraba con otro hombre haciéndole renovaciones a una casa el 22 de agosto, recibió múltiples balas a su cuerpo por un grupo de jóvenes en bicicletas que se le acercaron y le exigieron dinero.
Kirkwood fue transportado a un hospital local donde el próximo día por la madrugada murió de sus heridas.
El Informador estuvo en la escena mientras la policía conducía su investigación del homicidio, y pudo ver a una docena de agentes de la ley como a un vehículo forense estacionado frente a la casa, y a la policía que utilizaba lámparas bajo la obscuridad de la noche en busca de casquillos de balas y otras evidencias.
El joven, con esposas en las manos y pies y una cadena con llave alrededor de su cintura, parecía estar nervioso y atemorizado por las circunstancias en la cual se encontraba ante la presencia de un juez.
El abogado del acusado le pidió al juez que le diera más tiempo para examinar el caso, a lo cual el juez se lo concedió.
Familiares del joven estuvieron presentes observando el procedimiento judicial, y una vez se concluyó su apariencia, de inmediato salieron de la corte.
El hombre que se encontraba con el fallecido fue golpeado con un arma de fuego. La policía dijo que cree que el motivo de los tiros y la golpiza fue para robarles a los hombres, ya que los jóvenes huyeron con una cantidad indeterminada de dinero. También, que las víctimas y los asaltantes no se conocían.
Logan enfrenta los cargos de homicidio abierto, homicidio de felonía, asalto armado y un cargo por estar en posesión de un arma como un delincuente criminal. El joven ha estado encerrado en la cárcel desde el mes de julio por haberle mentido a la policía durante la investigación de un crimen violento.
En su última aparición en la corte, un juez le negó la oportunidad de salir bajo fianza y al momento se encuentra detrás de las rejas de la Cárcel del Condado de Kent. Al ser hallado culpable del homicidio de Kirkwood, el joven podría recibir una pena de cadena perpetua.
