Por Lee Marvin Abogado de Inmigración
Nos estamos acercando cada vez más a la transición de la Administración Trump a la del presidente Biden y las cosas no podrían ser más confusas o dramáticas. Las recientes acciones de Trump para aumentar la división y los desafíos al sistema legal para la transferencia de poder entre los presidentes no solo fueron inesperadas, sino inauditas. Esto ha dañado para siempre su legado como presidente, pero en realidad puede ayudar a la inmigración. Es cierto que su administración está procesando innumerables cambios más en el sistema, pero la forma en que se está haciendo puede impedir que sus desesperados intentos tengan éxito.
Afortunadamente, muchos de los cambios recientes podrían ser fácilmente revertidos o eliminados debido a la reciente victoria del Partido Demócrata al ganar la presidencia, la Cámara de Representantes y el Senado. Aunque todavía hay cientos de cambios en la inmigración instituidos por Trump que aún tomará tiempo deshacer, al menos estos cambios de último minuto se pueden corregir rápidamente.
Uno de los cambios recientes que puede ser revertido se relaciona con el proceso de visa H-1B y el cambio reciente que requiere que los empleadores paguen mucho más a los solicitantes de visa de lo que normalmente pagarían, así como el proceso de selección de estos trabajadores. Actualmente, la política entrará en vigencia 60 días después de la publicación de la nueva regla en el Registro Federal.
Otra regla propuesta relacionada con el proceso de visa de trabajo se hizo el 4 de enero cuando la administración Trump anunció que se está moviendo para acelerar una regla que permitiría al Secretario de Trabajo de los Estados Unidos revisar personalmente las solicitudes de visa de los trabajadores inmigrantes no agrícolas. Según la nueva regla, el secretario de trabajo tendría 10 días hábiles después de una decisión de apelación para intervenir y revisar personalmente un caso de visa H-2B. La regla se encuentra actualmente en su período de notificación y comentarios, y se espera que entre en vigencia el 3 de febrero. Debido a que la administración Biden tiene la mayoría en el gobierno (Senado y Cámara de Representantes), es probable que esta regla sea bloqueada antes de entre en vigencia.
Otro cambio también relacionado con la capacidad de un inmigrante para trabajar en el país es la regla propuesta anunciada el 19 de noviembre del 2020 por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS). Esta regla prohibiría a los inmigrantes con una orden final de deportación el recibir documentos de autorización de empleo. Esto está siendo peleado en la corte ya que se argumenta que la regla entra en conflicto con partes de la Ley de Inmigración y Nacionalidad y que interrumpe las prácticas y expectativas establecidas, así como castiga a las personas por estar presentes en los Estados Unidos después de recibir una orden final de expulsión.
Es evidente que la Administración Trump aún no ha terminado de intentar desmantelar el sistema de inmigración y el gobierno tardará algún tiempo en saber qué está en efecto y qué no.
No permita que la incertidumbre del gobierno destruya sus posibilidades de seguir adelante o luchar por sus derechos de inmigración. Estamos disponibles al 616-450-2981 para contestar sus preguntas.
Lee L. Marvin es un abogado especializado en asuntos de inmigración y casos criminales.