Por: Miguel Ángel/El Informador
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Wyoming, MI (ELINF).- Buenas las tengan (días, tardes o noches) todos ustedes mis amigos informados de El Informador. Quien iba a imaginar que una persona sin poder ver el mundo iba a llegar a ser un verdadero pez en el agua. Sí, así es, se trata de todo un luchador, se trata de Enhamed Mohamed.
Hasta los ochos años Enhamed miraba a una piscina y se quedaba fuera, YA QUE NO SABÍA NADAR. Pero Enhamed era distinto, se crió en Gran Canaria mientras sus padres vivían en el Sahara ocupado por Marruecos. Con las presencias y las ausencias en su vida, Enhamed nunca perdió su sonrisa.
Un glaucoma le quitó la vista. El niño de 9 años ya no podría correr por Las Canteras como lo hacía antes. La ciudad se convirtió en una jungla llena de barreras. La arena del desierto saharaui enferma los ojos de muchos niños, los padres de Enhamed creían que en Gran Canaria podría salvarse de ese peligro. Pero el destino no siempre coincide con los deseos, y la maldita enfermedad dejó al chiquillo ciego.
Unos meses después, alguien le dio la mano en la oscuridad en la que se encontraba Enhamed y aprendió a nadar con su primer entrenador, Ramón del Villar, del que además de la técnica adquirió una serie de valores que cimentarían su carrera deportiva, y que se pueden definir en la frase: “Puedes hacerlo, sólo tendrás que encontrar el cómo”. La vida le cambió de repente. Enhamed se volvió pez.
En Atenas o en Pekín Enhamed demostró que siempre hay alguien dispuesto a saltar las barreras. El pez grancanario nadó en Beijing animado por miles de personas de todos los países. Batió dos récords mundiales y se adjudicó cuatro medallas de oro.
La natación es su vida, pero no lo único. Enhamed realizó sus estudios en el IES Tomás Morales, y estudio Administración de Empresas, lo que unido a su dedicación deportiva le sitúan como ejemplo de superación y consecución de objetivos, a base de valentía, perseverancia y esfuerzo.
De forma paralela, ofrece conferencias a diversos colectivos en las cuales transmite los valores, capacidades y técnicas que ha adquirido en todos sus años de superación deportiva y personal.
Tiene 28 años y ya es poseedor de diez medallas de oro, cuatro de ellas de los Paraolímpicos de Pekín, dos son de Atenas y las últimas cuatro doradas las obtuvo en el Campeonato del Mundo de Natación Adaptada celebrado en Eindhoven (Holanda) en el 2010.
Es así que Enhamed se ha convertido en toda una leyenda del deporte Paraolímpico.
Cuando se trata de superación, aquellos que se ven limitados por alguna discapacidad demuestran que solo existen las barreras que uno mismo se pone. Pero cuando la propia superación se convierte en un escudo contra las adversidades, la victoria queda en un segundo plano. Es un ejemplo claro de superación personal. Nos leemos la próxima y recuerden: ”SI QUIERES, PUEDES”.
