Miami, 14 nov (ELINFORMADORUSA/EFE).-
Patricia y Manuel Oliver, que perdieron a su hijo Joaquín en el tiroteo de Parkland perpetrado en Florida en 2018, presentaron una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) contra Estados Unidos por «violación de derechos humanos» relativa a las leyes vigentes sobre armas.
La «Demanda por la supervivencia», como así se denomina, fue presentada el pasado 9 de noviembre por la organización Global Action on Gun Violence (GAGV) ante la CIDH, un órgano consultivo de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEA).
Nuestro objetivo es lograr el «primer fallo judicial de que la política de armas de EE.UU. viola el derecho internacional de los derechos humanos», señala la pareja en el comunicado, acompañado de un video en el que explican los motivos de esta acción legal contra Estados Unidos.
«A Joaquín le violaron los derechos humanos, el derecho a vivir, a estudiar en la universidad, a tener vida de adulto y casarse», dijo este lunes a EFE Patricia Oliver, quien resalta que, con esta denuncia, buscan una «condena moral» como forma de «presión internacional».
Los padres de Joaquín precisan en el vídeo que demandan al Gobierno estadounidense por «poner los derechos de armas» por encima del derecho de su hijo a la vida, por el «derecho a un futuro que nuestro hijo nunca tuvo», subrayan.
El matrimonio Oliver se ha mantenido muy activos en la denuncia de la violencia de las armas desde que el 14 de febrero de 2018 un total de 17 personas murieron en la escuela Marjory Stoneman Douglas de Parkland (sureste de Florida) a causa de los disparos de un exalumno, Nikolas Cruz, con un rifle semiautomático.
El matrimonio creó la fundación Change the Ref (cambia la referencia) con el fin de que la vidas de las 17 víctimas mortales de las matanza de Parkland «nunca se olviden» y se produzca un «cambio real» en la sociedad para lograr que en el futuro no ocurran tiroteos masivos.
La madre de «Guac», como llamaba todo el mundo al hijo de Patricia y Manuel, sostuvo recientemente que, en vez de frenarse, la violencia armada va en aumento en el país y eso muestra un fracaso como sociedad, una «franca decadencia».
El matrimonio pide además a la población que firme una petición en apoyo al caso. «Buscamos reunir miles de nombres de Estados Unidos y de todo el mundo», dice el matrimonio.
