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Desde inundaciones, sequías extremas, incendios masivos, huracanes y tornados, estos son solo algunos de los estragos que está dejando en el mundo entero la naturaleza quien es y será siempre implacable he indomable.
Pero sabemos también que en gran medida nosotros tenemos culpa de que algunos desastres tengan lugar en nuestras vidas. Por ejemplo, las inundaciones, cuantas veces vemos como la gran cantidad de basura tapa alcantarillas en algunas partes de México o en otros países que simplemente su estructura o la construcción de las casas no están preparadas para cuando se vienen lluvias fuertes.
Los temporales de lluvia ya no son los mismos de antes, están sumamente cambiados, cuando llueve, llueve a caerse el cielo y después deja de llover por periodos tan largos que provoca sequías extremas dejando a los agricultores y a los ganaderos con un grave problema para la alimentación de la población en general.
Hay lugares que no sufren estos problemas, pero hay lugares que si, en los cuales y en su tiempo se llegaron hasta pelear por el agua que había en las presas y por tratados internacionales.
En fin, el medio ambiente no se cuida solo, y no se sostendrá solo, sino ponemos de nuestra parte para cuidarlo cada vez más desastres, mismos que van a poner en riesgo a la humanidad que en el planeta habita.
La mejor forma de cuidarlo es mitigar los efectos negativos y malas prácticas que tenemos con ella y son el dejar de tirar basura, no contaminar el aire, los ríos y lagos.
Como dice el titular de este artículo de opinión la naturaleza siempre va a reclamar su poder el que por derecho le queremos arrebatar pero que no nos corresponde.
