Por: Roger Rivero
Chevrolet es uno de los fabricantes con más opciones en el segmento de los utilitarios, y coloca al Equinox (nuestro auto de prueba esta semana) en el extremo más pequeño de la línea de SUV. Ubicado por encima del Trailblazer y el Trax, y por debajo de los Chevy Blazer, Traverse, Tahoe y Suburban, el Equinox compite en el segmento de los SUV compactos, donde pesos pesados como el Honda CR-V o Toyota RAV4, llevan “la voz cantante”.
Chevrolet presentó la actual generación del Equinox en el 2018 y el año pasado trajo una actualización de mitad de ciclo con mejoras de estilo y un nuevo acabado, el RS como el que nosotros probamos. Para el año modelo 2023, el Chevrolet Equinox ve solo cambios menores, incluida una modesta ganancia de 5 caballos de potencia en su motor. Agregan tres nuevos colores de pintura, y mejoran el sistema de frenado. Chevy también ha lanzado modelos de edición Sport y Midnight, para el nivel de equipamiento básico LS.
Desde afuera y por dentro
El aspecto del Chevrolet Equinox no es llamativo, más bien pudiera bien camuflarse en un estacionamiento sin llamar mucho la atención, y nada de malo hay en esto. El modelo RS introducido el pasado año quizá sea el de mejor talante. A pesar de que RS deriva de “Rally Sport», no hay mucho que destacar en cuanto a desempeño, pero sí algo de apariencia. El Equinox RS trae detalles exteriores oscurecidos, rines grises oscuro de 19 pulgadas que hacen juego con el revestimiento de la parte inferior de la carrocería, insignias rojas «RS» y un inserto en la parte inferior del parachoques trasero del color de la carrocería.
En el interior abunda el espacio en la cabina para los pasajeros, aunque tres viajeros en el asiento posterior puede que se encuentren algo ajustados. El Equinox tampoco destaca por su capacidad de carga. Con 63.9 pies cúbicos de capacidad con los asientos plegados, queda rezagado cuando lo comparamos con muchos de sus competidores que bien sobrepasan los 70 pies. El diseño de la cabina es simple pero elegante, y esto ayuda a que se perciba espaciosa y de excelente visibilidad. La calidad de construcción es buena y los materiales están mezclados de forma habilidosa, para que los menos caros queden fuera del alcance.
Aparte de un compartimiento de almacenamiento espacioso en la consola central, el espacio de almacenamiento en la cabina del Equinox es meramente promedio.
Equipamiento y seguridad
Una pantalla táctil de 7 pulgadas es estándar, mientras que una algo mayor de 8 pulgadas es opcional. La conexión con teléfonos inteligentes de Apple y Android no necesita cables, pues es inalámbrica en todos los 2023 Equinox, así como un punto de acceso Wifi. El control del sistema de información y entretenimiento MyLink de Chevrolet continúa impresionando por su facilidad de uso y respuestas rápidas. Los gráficos son limpios, la interfaz intuitiva y los prácticos controles físicos de audio debajo de la pantalla propician una operación fácil.
Una buena cantidad de prestaciones de seguridad vienen de forma estándar, pero en los modelos más altos para obtener monitores de punto ciego, control de crucero adaptativo, sensores de estacionamiento y un sistema de cámara de visión envolvente tendrá que pagar adicionalmente. La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras otorgó al Equinox 2023 una calificación de seguridad general de cinco estrellas de cinco posibles, con máxima calificación en las pruebas de choque frontal y lateral, y cuatro estrellas en la prueba de vuelco.
En la carretera
El tren motor de este SUV es algo que no podríamos alabar. Con el modelo 2020, Chevrolet apartó el motor turbo cargado opcional de 2.0 litros y 4 cilindros que producía 252 caballos. La única opción para el Equinox 2023 es un motor turbo alimentado de cuatro cilindros y 1.5 litros que genera 175 caballos de fuerza, y una transmisión automática de seis velocidades. La transmisión la sentimos algo inconsistente, sobre todo con tendencia a realizar más cambios descendentes de los necesarios. Pude hacer las paces con el motor de 1.5 litros, habituado al retraso del turbo y luego un tirón fuerte que muchas veces hizo patinar los neumáticos.
Luego de algunas arrancadas algo inestables, una vez en marcha, el Equinox ofrece un manejo atractivo, con dinámica de conducción ágil y apacible, gracias a la amortiguación bien ajustada. Atributos como el buen control de la carrocería, la poca inclinación en las curvas y dirección directa, hacen que este sea uno de los SUV más placenteros de conducir en su clase. La tracción estándar es al frente, estando disponible AWD o tracción en las cuatro ruedas como una opción de $1,600 dólares. Aunque elija la opción de tracción total, no creo recomendar llevarlo muy distante de la carretera, pues solo 7.6 pulgadas o 19 centímetros le separan del suelo.
El consumo de combustible es otro punto fuerte del 2023 Equinox. El modelo con tracción frontal logra casi 28 millas u 8.4 litros cada 100 km, lo que lo coloca por encima del promedio de los SUV compactos.
Para escoger
El 2023 Chevrolet Equinox viene desde la planta de San Luis Potosí en México en cuatro terminados: LS, LT, RS y Premier. Todos los modelos tienen el mismo tren motor. El modelo LS más económico viene bastante bien equipado por $26,600, y se le pueden agregar mejoras como el paquete “Driver Confidence II” que por $195 agrega sensores de estacionamiento. Otros paquetes disponibles son el de “Conveniencia” por $785, que agrega ajuste eléctrico de los asientos y una pantalla de instrumentos digital de 4.2 pulgadas, o puede agregar monitor de punto ciego y alerta de tráfico cruzando en la parte trasera por otros $200. Con estas adiciones que lo colocan ligeramente sobre los $27,000 dólares, este sería el modelo que recomendaríamos.
El Chevrolet Equinox RS como el que probamos tiene precio inicial de $30,700, y trae más características de serie y un aspecto más deportivo, gracias a las llantas de 19 pulgadas pintadas de negro, el interior con costuras rojas, y rieles en el techo entre otras mejoras visuales. Además de las opciones de modelos anteriores, la versión RS está disponible con el paquete “RS Leather”, que por $1,580 agrega tapicería de cuero y un estéreo premium Bose de siete bocinas.
El más caro de los Equinox es el Premier, que comienza en $31,800 y adiciona entre otras amenidades, tapicería de cuero, volante con calefacción, pantalla táctil de 8 pulgadas, carga inalámbrica de dispositivos, dos puertos USB adicionales y puerta trasera eléctrica de manos libres.
Hay buenos competidores en la categoría de SUV compactos. Acompañan al Equinox los ya mencionados Toyota RAV4 y Honda CR-V, así como el Nissan Rogue, Mazda CX-5, Hyundai Tucson, Kia Sportage, Volkswagen Tiguan o el Jeep Cherokee, y está lista no está completa.
Concluyendo
No hay nada espectacular o siquiera muy resaltable en el Chevrolet Equinox. A riesgo de ser algo ordinario en mi definición, podría decir que es “uno más en el montón”, que se camufla bien entre el resto, sin llamar mucho la atención. El fabricante parece estar complacido y el consumidor también, pues tiene atractivos innegables como su amplitud interior, buenas cifras de consumo o precio accesible.
Nos gustaría que al próximo Equinox le regresaran el motor turbo de 2.5 litros, pero como afirma el refrán: El que quiere de esta vida todas las cosas a su gusto, tendrá muchos disgustos.
Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera, los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.
