Por Miguel Ángel
WYOMING, MI.-Saludos amigos de El Informador. Revancha, revancha y una vez más revancha…
Por cuarta ocasión consecutiva los Warriors y los Cavs se topan en las finales de la NBA. Estadísticamente es casi imposible que ocurra esta situación, al menos que sea una saga de Hollywood protagonizada por Sylvester Stallone como Rocky, Rambo y muy pronto los Indestructibles.
Para ponerlo en perspectiva, en las ligas deportivas profesionales de los Estados Unidos (NFL, NHL, MLB, MLS) NUNCA había pasado.
Para los que les gustan los números y las matemáticas; desde 1980 el 42% de los equipos que han alcanzado las finales de la NBA regresan al año siguiente, es decir, ocurre 1 vez cada 6 años.
Esto indica que hay un 17.5 % de probabilidades de que 2 equipos tengan revancha en estas instancias. Ahora, para que los mismos conjuntos se vean las caras tres años al hilo, tendrían que pasar 32 temporadas, y para que lo hagan por cuatro consecutivas, ¡¡¡185 años!!!
En otras palabras, es más factible que veamos autos voladores antes que se vuelva a dar esta situación. La pregunta que tendríamos que hacernos en este momento sería: ¿Qué podemos esperar de esta cuarta edición Cavs vs. Warriors?
Primero debemos partir de la premisa de que una vez más estaremos viendo: El mejor jugador VS El mejor equipo
-Siendo positivos:
LeBron James está poseído, está en una misión para demostrar que es el #1 de todos los tiempos.
Que junto a un fulano, zutano, mengano y perengano, vencieron a la Conferencia del Este y contra todos los pronósticos podría existir una épica sorpresa.
-Siendo realistas:
La única manera en la que Cleveland pueda ganar el título es si el autobús de los Warriors se pierde en la dimensión desconocida o que Michael Jordan, Bugs Bunny y los Monstars de Space Jam se conviertan en sus refuerzos.
Golden State tiene a cuatro futuros elementos del salón de la fama del basquetbol. Houston les picó la cresta y los hizo ver “vulnerables”, por lo cual alguien pagará los platos rotos y ese alguien es ni más ni menos que el rival en turno, Cleveland Cavaliers.
Lo más probable:
LeBron tendrá un partido en el que se convertirá en Capitán América, Thor, Hulk, Superman, Batman, Gokú, Mazinger Z, Voltron, Leono, He-Man, “Chicharito” y El Chapulín Colorado, al mismo tiempo guiando a su equipo a una victoria.
Sin embargo el resto del tiempo sus superpoderes serán contrarrestados por un equipo que bien podría ser en unos años el mejor de toda la historia.
Un Ave María-
Andre Iguodala está lastimado y no se sabe cuándo pueda regresar, pero si a esto se suma un mal paso de Steph Curry (que hemos visto tiene vidrio en los tobillos) o Draymond Green volviéndose loco y recibiendo 58 faltas técnicas para ser suspendido de las finales, habrá una posibilidad para que Cleveland pueda hacer algo en esta serie.
Nos leemos la próxima semana y recuerde: “Al final todo saldrá bien y si no sale bien es que no es el final”.
