Miami, 24 abr (ELINFORMADORUSA/EFE News).-
Una mujer de 81 años y enferma de Alzheimer fue deportada desde Texas a México este viernes a pesar de ser residente legal en el país, según denunciaron sus familiares al canal hispano Telemundo.
Socorro Guardiola de Saldaña, que tiene residencia en los Estados Unidos desde 2005, fue localizada en la ciudad mexicana de Reynosa y el mismo viernes se iniciaron los trámites necesarios para su regreso a La Joya (Texas).
Los familiares de la señora habían reportado su desaparición el viernes después de comprobar que de madrugada había salido sola e inadvertidamente de su casa.»Ella se salió de la casa. Me imagino que se ‘norteó’, a veces eso le pasa a ella, se sale a ver si conoce el lugar, ella se salió en la noche», dijo Jocelyn Vásquez, nuera de Socorro.
De acuerdo con un reporte de la policía de La Joya, un oficial descubrió a la mujer en un automóvil manejado por un joven cuando le dio el alto al vehículo por cuestiones de tráfico en la madrugada del viernes.
El oficial le preguntó al joven quién era la persona que iba en el asiento de atrás y éste dijo que era alguien a quién había levantado de la calle y no conocía, y ella dijo lo mismo, tras lo cual a preguntas del policía Socorro Guardiola dijo que vivía en Miguel Alemán, en México, y había cruzado la frontera el día anterior.
El agente llamó a la Patrulla Fronteriza para que se encargara de la señora, porque «ellos tienen un sistema donde pueden checar las huellas», dijo el sargento de la policía de La Joya Manuel Casas a Telemundo.
Al recibir la denuncia de desaparición, la policía local se dio cuenta de que podía ser la señora que dejaron a cargo de la Patrulla Fronteriza, pero para entonces ya había sido llevada a México.
«Si hubieran hecho el proceso como se debe de hacer, que es correrle las huellas (dactilares) ellos automáticamente hubieran sabido que ella es residente», dijo la nuera.
La Patrulla Fronteriza, por medio de un comunicado, señaló que sus agentes transportaron a Guardiola una instalación donde se realizó una búsqueda biométrica y verificaciones de registros y «no revelaron estado migratorio o información para contrarrestar su reclamo de ciudadanía mexicana».
«Posteriormente fue expulsada de Estados Unidos», agrega el comunicado .
La Patrulla Fronteriza indicó que después con nueva información se supo que era una residente permanente admitida legalmente e informó de que inició «un esfuerzo coordinado» con «la policía local y socios internacionales para localizarla y reunirla con su familia en los Estados Unidos».