Los Ángeles, 13 feb (ELINFORMADORUSA/EFE News).-
a Arquidiócesis de Los Ángeles ofreció nuevamente disculpas a los fieles perjudicados por miembros de la Iglesia y reafirmó su compromiso y apoyo a los sobrevivientes de abusos sexuales, tras la demanda que entabló una presunta víctima del exsacerdote Michael Baker.
La acción legal contra la arquidiócesis más grande de Estados Unidos, que fue presentada en un tribunal de Los Ángeles el viernes pasado, también nombra al cardenal Roger Mahony, quien se desempeñó como arzobispo de Los Ángeles entre 1985 y 2011, reportaron medios locales.
«La Arquidiócesis ha expresado su profundo pesar por los errores cometidos en el manejo del caso del exsacerdote Michael Baker», dijo en un comunicado enviado a Efe.
El demandante, identificado como John LA-1 Doe, de 32 años, asegura que sufrió abusos sexuales por parte de Baker entre 1993 y 1997, cuando tenía entre 6 y 10 años.
La demanda se presentó gracias a la nueva ley AB 218, que extiende el tiempo en que los presuntos afectados pueden presentar querellas legales en California.
En un informe entregado por la Iglesia en 2004 se reportó cómo Baker engañó a feligreses, terapeutas, líderes eclesiásticos y, sobre todo, a sus víctimas. «Manipuló los protocolos de tratamiento para continuar aprovechándose de gente joven», asegura la Iglesia.
Baker admitió en 1986 ante Mahony haber tenido relaciones inapropiadas con dos menores. El sacerdote fue retirado del ministerio y enviado a un tratamiento médico.
«Los expertos pensaron que la rehabilitación era posible. Basado en las recomendaciones del tratamiento, Baker fue autorizado para regresar al ministerio restringido», explica el comunicado.
En el año 2000, el sacerdote fue retirado de la Iglesia.
Baker fue acusado de abusar de al menos 23 jóvenes. En 2007 se declaró culpable de abuso y cumplió más de 10 años de cárcel.
La Arquidiócesis subrayó que ha implementado muchos cambios y reformas en los años transcurridos para asegurar que parroquias, escuelas y ministerios sean lugares seguros para la comunidad.
Las acusaciones de abuso que involucran a menores, ya sea por un miembro del clero o un laico, son reportados a la policía y se hacen anuncios públicos en los lugares donde la persona ha servido, recalcó la institución religiosa.
