CÓRDOBA, ARGENTINA.- Thiago, un niño de 2 años, fue torturado y abusado sexualmente hasta la muerte por su padrastro, identificado como Ariel Farías de 28 años.
Tanto él como la madre del menor, Pamela Palacios de 27 años, lo llevaron al hospital asegurando que se había atragantado con su cena, sin embargo, su cuerpo estaba lleno moretones y quemaduras de cigarro.
Así fue como médicos descubrieron que el pequeño llevaba tiempo siendo víctima de torturas y abuso. El pequeño murió en el hospital el pasado 19 de marzo, poco después de llegar.
Tras su muerte, le practicaron una autopsia que reveló el horrible abuso al que fue sometido. El menor fue golpeado brutalmente e incluso violado por un largo tiempo. Tenía quemaduras y moretones en todo el cuerpo, incluso en los genitales.
La causa de muerte fue un severo golpe en el estómago, que hizo que falleciera de un sangrado interno. Solo horas después de su muerte, la Policía abrió una investigación sobre el incidente y arrestó al padrastro, más no a la madre.
Farías fue arrestado porque la chamarra que llevó al hospital presuntamente estaba cubierta de sangre. El abuelo del niño, José Fleitas, le dijo a un medio local que le advirtió a las autoridades hace más de un año e incluso llevó evidencia de que maltrataban a su nieto, sin embargo, aseguró que ellos «no hicieron nada».
Autoridades anunciaron que la madre está siendo investigada pero que actualmente no está bajo arresto. También ya comenzaron a indagar al padrastro.
