Editorial por Luis Molina
Un par de días antes del cierre de esta edición me tocó entrevistar un par de personas que alegan que fueron víctimas de robo de sueldo. Opino que esto no solo es una mala acción sino algo inhumano porque todos trabajamos por necesidad y aun si no fuera por necesidad cada trabajador es digno de su salario y se le tiene que pagar por su trabajo.
Como medio de comunicación estamos totalmente en contra de cualquier empresa o negocio que retenga el pago de sus trabajadores y quiero dejarle saber a nuestros lectores que nuestras cámaras siempre estarán listas para poner al descubierto a cualquiera que trate de hacer lo mismo.
El robo de sueldo es un delito y penado en el estado de Michigan y no solo aquí sino en todos lados y existen leyes que protegen a los trabajadores. Independientemente del estatus legal que usted tenga nadie puede retener su sueldo y negarse a pagarle por su trabajo.
Quiero alertar y animar a cualquier persona que no calle que si una empresa o negocio pequeño se niega a pagarle que se contacte con El Informador para darle seguimiento a su caso. Estamos a favor del desarrollo y crecimiento de los negocios, pero estamos en contra de cualquier negocio que trate de abusar de nuestra gente.
De hecho, el que una persona esté trabajando con papeles chuecos y no le quieran pagar por esa razón o traten de intimidar o amenazar con echar la inmigración eso les puede ayudar para poder arreglar sus documentos y quedarse en el país de una manera legal.
