Por Edgar Castro/LANSING, MI
Tres personas murieron y otras 5 resultaron heridas en un tiroteo que provocó gran pánico en la Universidad Estatal de Míchigan, en East Lansing el lunes 13 de febrero por la tarde. La policía se encargó de difundir a través de las redes sociales unas fotografías del sospechoso tomadas por las cámaras de seguridad en las que se veía a un hombre de baja estatura con zapatos rojos, chamarra de mezclilla y una gorra de béisbol. La policía informó minutos después que localizaron al sospechoso fuera de la universidad sin vida por una herida que se había provocado a sí mismo.
“Parece que el sospechoso ha muerto por la herida de un disparo autoinfligido. Se ha confirmado que ha fallecido”, declaró Chris Rozman, subjefe interino del departamento de policía del campus.
Posteriormente, la policía identificó al atacante como Anthony McRae, un hombre de 43 años que no es empleado ni estudiante de la universidad, antes de suicidarse fue encontrado con una nota que detalla amenazas a otras dos escuelas. McRae había estado viviendo con su padre, tenía condenas por armas de fuego y era conocido por disparar armas en la propiedad, según los vecinos.
Los tres muertos y los otros cinco heridos en el tiroteo que se produjo el lunes por la noche en la Universidad de Míchigan (M.S.U.) eran estudiantes, mientras que el agresor, un hombre de 43 años, no tenía relación con ese centro educativo.
El subjefe interino de la Policía de la universidad, Chris Rozman, señaló en conferencia de prensa que las dos primeras víctimas mortales fallecieron en un primer tiroteo en Berkey Hall, un edificio académico, mientras que la tercera murió en M.S.U. Union, un lugar donde los estudiantes suelen reunirse para comer o estudiar.
Las tres víctimas que fueron identificadas como:
- Brian Fraser, estudiante de segundo año
- Alexandria Verner, estudiante de tercer año.
- Arielle Diamond Anderson, de 19 años.
La Universidad Estatal de Míchigan tiene unos 50.000 estudiantes. East Lansing está a unas 90 millas (145 kilómetros) al noroeste de Detroit. El auditorio del instituto East Lansing, donde el lunes por la noche se celebraba una reunión del consejo escolar, fue cerrado y la policía impidió que la gente saliera.
Horas después del tiroteo la gobernadora del estado, Gretchen Whitmer, asistió junto a las autoridades del plantel, padres de familia y estudiantes quienes hicieron una vigilia y crearon monumentos en honor a sus compañeros heridos.
